La situación que estamos atravesando es difícil especialmente para los pequeños negocios que además son la mayor parte de las empresas mexicanas. Sin embargo, sabemos de nuestra fortaleza y que vamos a salir adelante nuevamente.
Para algunas empresas será más fácil sobrellevar esta situación, para otras que dependen del trabajo in situ o de los clientes finales, como el sector turístico, será todo un reto; por eso la primera sugerencia es reflexionar qué pudiste haber hecho para que este tipo de situaciones no te derribaran o te encontraran con mayor fortaleza. Quizá podrías haber fortalecido la relación con tus clientes, darles un mejor servicio para retenerlos, atender y fidelizar a tu comunidad en redes sociales, diversificar tu negocio, invertir en innovación ¿Invertir dinero?… ¡No! Invertir tiempo, observando, analizando, ideando nuevas formas de vender y ofrecer más valor con tus productos/servicios.
Y ahora, es momento de pensar en qué podemos hacer con lo que sí tenemos, que por el momento es tiempo libre, mucho.
¿Cuántas cosas has dejado de lado por que no tenías tiempo? Es momento de retomar esas viejas intenciones y ponerlas en acción. Aquí te dejamos algunas sugerencias por si el estrés no te permite ver la oportunidad que representa esta pausa en las actividades cotidianas:
Busca otras maneras de vender tu producto/servicio:
Algo es seguro, la gente no para de consumir, puede reducir la cantidad, cambiar las marcas que compra habitualmente, la frecuencia e incluso, los medios por los que lo hace, todo esto representa retos y oportunidades para grandes y chicos.
- Vende en línea
Ahora que la gente debe estar en casa no dejará de consumir, no puede dejar de alimentarse o cumplir algún capricho si tiene los recursos para hacerlo, sin embargo aún hay muchas personas que ven con recelo las compras en línea, pero ahora que es una extraordinaria alternativa se romperán muchas barreras. En fin, un poco de visión nos indica que el comercio en línea crecerá en México superando esta etapa y precisamente gracias a ella. Si ya lo estás pensando, AQUÍ puedes leer algunas recomendaciones sobre las tiendas online. - Arma paquetes para reducir costos
Paquetizar es una estrategia con la cual puedes aumentar tu beneficio económico por medio de aumentar el valor que ofreces. No es más que la vieja confiable del cross selling/up selling, es decir, vender productos complementarios al que inicialmente buscaba el cliente o vender una versión ampliada del mismo. - Haz alianzas con otros proveedores
Es otra forma de llegar a nuevos clientes ampliando nuestro mercado y de ofrecer más valor a los que tenemos. También puede ser la oportunidad de apoyarnos entre pequeñas empresas para salir todos adelante. - Haz preventas de productos exclusivos
Algo parecido al crowdfunding o financiamiento colectivo. Sirve para que te capitalices en estos días en que las ventas han bajado sobretodo en ciertos sectores como el turismo o los productos de lujo. - Ofrece meses sin intereses
Este método de pago siempre es tentador para los clientes, quizá implique sacrificar un poco el margen de utilidad pero te ayuda a capitalizarte y no perder oportunidades de venta por la falta de liquidez generalizada. - Ofrece formaciones mediante membresías
¿Lo habías pensado? Puede ser el momento de ofrecer una variante en tu modelo de negocio que te ayude a capitalizarte y se sostenga a largo plazo, ofreciendo valor constantemente con lo que sabes hacer y le puede interesar a otras personas.
Prepara el terreno para cuando mejore la situación:
Si afortunadamente eres de los que tuvo precaución de ahorrar o invertir para tener ingresos pasivos, tus actividades no tendrán que ser tan reaccionarias y te puedes dedicar a planear qué harás cuando esto pase y llegue el momento de aprovechar las oportunidades del nuevo panorama.
- Diseña nuevos productos
Los tiempos cambian; las personas también y les encantan las novedades. Este momento puede ser ideal para observar las tendencias, necesidades y preferencias del mercado y echar a volar la imaginación y diseñar una nueva oferta. - Genera estrategias para el lanzamiento de productos
Si puedes incorporar nuevos productos o has diseñado una nueva oferta podrías pensar cómo lanzarla con bombo y platillo, para darla a conocer masivamente y que su éxito sea mayor. La diferencia entre lanzarlo simplemente y lanzarlo de manera creativa, generando una campaña o diferentes maneras para que éste llame la atención podría significar no solo la oportunidad de darle relevancia al nuevo producto sino a tu empresa en general. A veces la forma de presentarlo genera más impacto y notoriedad que el producto mismo. - Idea maneras de innovar en tu negocio
La innovación no solo es necesaria de cara al cliente, también tiene que ver con cómo se llevan los procesos dentro de la empresa para hacerlos más eficientes, en el reclutamiento de personal para conseguir gente mejor calificada o en la capacitación del que ya está dentro para que sea más agradable y fructífera. Un ejemplo muy claro en estos momentos es el home office que aunque la mayoría de las empresas se negaba a implementarlo, ahora es un recurso que está siendo de gran ayuda y de cierta forma los obliga a rediseñar procesos y establecer nuevas medidas de seguridad. - Prospecta nuevos clientes
Quizá pensemos que éste no es momento de vender, sin embargo las personas y las empresas no pueden dejar de consumir. Si las ventas han bajado porque tus clientes habituales compran menos, quizá sea señal de que debes ver más allá y dejar de depender de la misma cartera de siempre. - Detecta oportunidades
Es un hecho, lo único permanente es el cambio. Observa a tus clientes, a tu competencia tanto directa como indirecta y mantente alerta para encontrar nuevas formas, nuevas alianzas, ideas de productos o servicios, nuevos mercados o cómo interactuar con las nuevas generaciones que serán futuros compradores. - Piensa cómo diversificar tu negocio o inversiones
Como se dice vulgarmente: no pongas todos tus huevos en la misma canasta, si dependes solo de una fuente de ingresos, de una sola línea de productos o de una cartera de clientes que no actualizas desde hace meses, es momento de replantear y virar a nuevos horizontes.
Afianza la relación con tus clientes:
Que las ventas anden bajas no quiere decir que rompas la relación con tus clientes o tu comunidad, al contrario, es momento de demostrar cuánto te importan y qué tan adaptable es tu empresa al cambio, además de continuar posicionando tu marca de manera positiva.
- Mantén comunicación con ellos.
Hazlo de manera empática, preguntando cómo están o cómo puedes ayudarles. En estos momentos de incertidumbre, estrés y tensión cuando las personas estamos más vulnerables, enviar un mensaje o hacer una llamada sin ánimo de vender sino por genuina preocupación dejará una buena impronta en la memoria de tu cliente sobre ti. - Sigue alimentando tus redes sociales.
Más que pretender vender, intenta fomentar la comunidad en torno a tu marca. Es ella la que no te dejará caer y la que te puede sacar adelante cuando la situación comience a mejorar, gracias no solo a sus compras, que quizá no sean frecuentes en este momento, sino también ayudándote a ganar visibilidad recomendándote, compartiendo tus contenidos, incluso dándote palabras de aliento. - Testea otros canales de comunicación.
De esas tareas para las que nunca tienes tiempo o no te has atrevido. Puede ser una actividad incluso divertida que te permitirá llegar a nuevas audiencias o de maneras distintas con buenos resultados. Más allá de Facebook, puedes probar el e-mail, canales de Telegram, otras redes sociales como YouTube, Instagram, Pinterest, TikTok, LinkedIn. - Desarrolla contenidos para difundirlos por medio de redes, blogs, podcasts, etc.
Una más para la que el tiempo nunca nos alcanza. Ahora lo tienes y ya que eres el mayor conocedor de tu producto y de tus clientes, es buena idea que retomes ese blog abandonado o si ni siquiera lo tienes, haz una lluvia de ideas para que comiences a inspirarte, la que te parezca más interesante desarrollala en subtemas para después explicar claramente cada uno. Cuando estos contenidos comiencen a ganar visibilidad y llamar la atención de tus clientes, agradecerás haber puesto manos a la obra.
Revisar y mejorar la situación dentro de tu empresa:
¿Cuántas veces en el ritmo acelerado del día a día dejamos de revisar cómo se van desempeñando las cosas en casa? En esta pausa puedes comenzar el escrutinio para corroborar que todo esté funcionando bien o de qué manera se puede mejorar. También es bueno ordenar tus papeles y tus espacios, algo tan simple como el orden puede ahorrarte mucho tiempo en tus procesos.
- Capacitar a tu personal y a ti mismo.
A veces parece un sacrificio tomar tiempo de los horarios laborales para que tú o tu personal actualicen sus conocimientos, así que ahora que la carga de trabajo puede haber bajado, pueden aprovechar para reafirmar o aprender algo nuevo. En internet puedes conseguir muchísimo material para ayudarte: libros, podcast, videos, artículos escritos, ¡hasta cursos completos gratuitos! Si tienes conexión a WiFi no hay pretextos. - Poner orden en tu bodega, escritorio, oficina, computadora…
Revisar papeles y desechar los que ya no han de servir, ordenar tu inventario o herramientas para que sean más accesibles, despejar espacio en tu computadora… todo esto puede hacer que el día a día se desarrolle con más fluidez. - Hacer auditoría a tus finanzas
Ojalá no sea el caso, pero detectar robos o gastos hormiga cuanto antes hará que tus finanzas sean más saludables. Revísalas con lupa cuanto antes. - Revisar tus indicadores de rendimiento y pensar cómo mejorar los que vayan flojos
Cada área de tu empresa merece que le pongas la máxima atención. De esta manera podrás encontrar en cuál puede haber una oportunidad de mejora para incrementar sus rendimientos.
Fortalecer tu vida personal:
Tú eres la persona más importante en tu emprendimiento, al menos mientras éste dependa de tus decisiones, cuidar de tu bienestar físico y emocional será una inversión para que puedas continuar con tu ritmo de trabajo.
- Aprovecha para estar con tu familia y retomar comunicación con tus amigos.
Sabemos que la carga de trabajo, el estrés, la falta de tiempo, pueden deteriorar la relación con tus seres queridos, así que puede ser una gran ocasión para hacerles espacio en tu vida y fortalecerte anímicamente. - Cuidar tu salud
Es tu oportunidad para comer a tus horas, llevar una alimentación más equilibrada, hacer ejercicio, dormir mejor. Estas acciones fortalecerán tu cuerpo para que retomes con más energía los retos que se vayan presentando.
De todo corazón deseamos que hayas hecho un colchoncito para que no te pegue tan fuerte y consigas salir de este bache sin muchos raspones.
Recuerda aprovechar el día y tus recursos al máximo.
¿Tienes alguna otra idea?
Cuéntanos para poner manos a la obra 😀
Aquí te dejamos la infografía, da clic para ampliar
Excelente lluvia de ideas para detectar oportunidades en la crisis que estamos viviendo, es un gran momento para ocuparnos